Iliana Pichardo Urrutia
Selección de poemas de Todo lo que fue futuro | All That Was Future de la editorial bilingüe norteamericana Mouthfeel Press, 2024.
POSTALES
Objetos rescatados del naufragio:
una postal
que compraste en una ciudad con puerto
tenía la ilustración a lápiz
de un baúl antiguo de viaje
y unos versos
la compraste porque ya añorabas
esa ciudad antes de irte
la sal da nostalgia, lo sabías
los espacios secretos
los interiores húmedos
la relación inversa con el tiempo
que no deja morir la presencia
y trae de vuelta los muros
las calles angostas
los tranvías
desde entonces la llevas contigo
en cada nueva vida
la muerte necesita altares, lo sabías.
EL DESTIERRO
PALABRAS CLAVE
Nieve; sal; manzanilla; Pomada de la Campana.
ABSTRACTO
Destierro es expulsar a alguien de un lugar, un territorio determinado. Por ejemplo, es morir a la vida, lo que también se llama nacer con una sentencia de muerte. Morir es abrir los ojos a la nieve, la primera vez que un cuerpo se sostiene fuera del agua amniótica. La primera respiración sin un cordón cuyo ombligo es el Big Bang, la primera exhalación en solitario donde la madre es un afuera, una mirada que te nombra por primera vez, mientras acaricia tu pelo negro de ceniza. Tu hora es luna a medianoche de un día once de un mes uno. Eres todo uno, tu nombre son líneas verticales, la trayectoria hacia un afuera: un destierro. El lugar es un gran lago salado. Así es el nombre de esa ciudad que abre su tormenta de nieve para bautizarte. Los copos son marcas, como las huellas que un ave deja, un palpitar de cuervo, una avalancha que es vida y es silencio. Después, el estruendo, el viaje fuera hacia otra tierra que en realidad siempre fue la tuya. Pero algo te queda palpitando dentro, un corazón blanco, un desierto, y la vida no vuelve a ser la misma porque siempre serás un faro viendo a la distancia. Tu abuela en la tierra nueva te recibe, dice que tu pelo no es ceniza es fuego. Por eso el shampoo de manzanilla, porque quizás quiso decir que tiene la maleabilidad del color almendra. Quizás quiso decir que tu tez no es morena, tu tez es blanca, lo ha sabido siempre. Por eso el amor en forma de pomada: Pomada de la Campana para aclarar la piel que enmudece bajo un sol que aún no puede descifrar. Y es la luna de tu abuela quien te hamaca: Muñequita linda de cabellos de oro, que más tarde cambia por cabellos negros porque no hay pomada ni manzanilla que lustre lo que eres: una X marcada en el mapa blanco de la nieve.
QUERER VOLAR NO TE HACE AVE
A Mita
Su cuerpo era frágil
en el aire
la gravedad truncó
su vuelo
¿Hermana – pájaro?
estaba en el piso hecha ovillo contra la cama. quiso volar de un colchón a otro como si fueran montañas, pero antes de llegar aterrizó en la base de la cama de cemento
duro
frío
cuando desplegó su cuerpo viste que su pierna ya no era para caminar, ahora era una funda de sangre, un río, una canoa, que asomaba las costuras, las capas intermedias de los músculos y el hueso, como el carozo de una fruta roja, una ciruela, abierta de par en par
estaban solas
en ese cuarto de hotel
de playa
habían subido a ponerse el traje de baño
para ir al mar
tú batallabas con la puerta / una ballena pesada que no quería abrirse // tu hermana golpeaba la ventana / desde una torre gritaba / un aullido de sirena agonizante >>; tú, cuerpo de niña de ocho años desnudo, resbaló sobre ese piso rojo, un tapete de arterias y venas desbocadas // entendiste lo que es el adentro de la piel / lo que ha de morir >>; tú, otra muerte >>; recordatorio: el cuerpo es frágil // la que destrabó la puerta fue tu hermana y por protegerla corriste por el pasillo / gacela ensangrentada / detrás iba ella con sus plumas rojas derrotadas / arrastrando una extremidad que iba dejando el trazo de su vuelo sobre el piso
Abuelo tomó el control de todo
se llevó a Papá-pájaro y Mamá-pájaro
que no atajaban el vuelo
porque sus ojos y sus brazos
acunaban en su nido a ese polluelo maltrecho
que graznaba en su dolor
Tú, efigie roja, te quedaste con la Abuela
quietecita y de pie
contra la pared mirabas
a las camaristas que afanadas
quitaban sábanas
limpiaban rastros
de sus juegos de niñas
y campos de batalla.
Iliana Pichardo Urrutia (Salt Lake City, Utah, 1980) Escritora, documentalista y guionista, que creció en Ciudad de México. Su trabajo ha sido publicado en Revista de la Universidad, Rio Grande Review, SmokeLong Quarterly, Tierra Adentro, entre otras. Recibió la Career Development Grant de la American Association of University Women (2022-2023) y el Primer Lugar en Poesía en los Premios de Escritura Creativa Bilingüe UTEP 2022 y Segundo Lugar en No ficción. Obtuvo su Maestría en Escritura Creativa en la Universidad de Texas, donde se desempeña como instructora adjunta. Actualmente reside en El Paso, Texas. Todo lo que fue futuro/All That Was Future, traducida al inglés por Kadiri J. Vaquer Fernández, es su primer libro de poesía por publicarse en 2024 con Mouthfeel Press. ilianapichardou.com
Créditos a Facundo Torrieri por la fotografía.