Indran Amirthanayagam
Presentamos una selección de poemas de Indran Amirthanayagam de Ceilán (actual Sri Lanka). Él es poeta, músico, diplomático, editor y traductor nacionalizado estadounidense de origen ceilandés. Edita poemarios en Beltway Editions (www.beltwayeditions.com). Redige Beltway Poetry Quarterly (www.beltwaypoetry.com), anfitrión de “The Poetry Channel” en YouTube (https://youtube.com/user/indranam) Es uno de los dirigentes de DC-ALT, una asociación de traductores literarios. Además, bachiller en Literatura Inglesa de Haverford College y tiene una maestría en periodismo de la Universidad de Columbia.
Isla itinerante
Soy una isla que se mueve sobre la faz de la tierra.
Me muevo adentro y me muevo afuera. Nunca
me quedo tranquilo en unos brazos, en la mesa
de una cocina. Nunca me quedo abrazado
y guardado en una joyería. No me atrapa
ninguna pareja pero mis hijos sí, ellos
me detienen por un rato. Y me muevo
de nuevo con un poema, detrás de una chica,
al observar un pájaro. Soy pacífico. Nunca
aprendí a cazar con armas. Le pido disculpas
a mi abuelo: gran hombre pero de su tiempo.
Ahora estamos frente a una crisis distinta,
la desaparición repentina de cuarenta
o más por ciento de las especies
en esta tierra donde me muevo
Y estoy muriéndome lejos
de mi patria aunque me pregunto:
¿Cuál será la patria del poeta? Te doy
tres posibles respuestas: el verso,
la metáfora, la página en blanco.
Preguntón
Siempre con tus preguntas
imposibles, querido. La búsqueda
de la verdad no puede abarcar
en la concepción de ellas. Acaso,
¿no somos pequeños dioses?
¿No podemos cultivar los jardines
y cuartos y platos a nuestro gusto?
Dime si hay algún valor entonces
en nuestra educación liberal,
de hurgar en diccionarios y aprender
multiplicaciones infinitas de Pi.
Dime si vamos a morir sin saltar
(al menos en los sueños) río y mar
y tierra y tiempo entre nosotros.
Elefante de regreso
Llego con mi panza como una maleta.
Y veo donde pueda acomodarla
para que no se la note en la foto
o que vuelva la inspiración
de un chisme. Y siempre viajo
con mis libros, tanta grasa y carne
para esparcir en la mesa de la cocina.
Vengan a comer queridos anfitriones.
Tengo imágenes de la isla,
del elefante que bebe alegre
con su madre en el río
al lado de los cocoteros.
y los mangos y los mangostanes,
el muchacho todavía en casa
antes de la expulsión
(digo migración) del paraíso.
Invitación al tiempo
No escribo lírica siempre. He cruzado al país
de la prosa y del ensayo. He esbozado cuentos
y poemas noticieros. Pero ante las torres
del lenguaje barroco con sus puertas llenas
de senderos sin salida y flores derramándose
nunca he quitado mi sombrero y admito
que me siento bien, sin sentido de falta,
y te invito a hacer tus arreglos
con los fanfarrones y por la luz del día
ven con nosotros. Tenemos espacio,
una tienda grande. Y te necesitamos
para la guerra final entre el bien
y el mal. La lírica y todas las expresiones
que no ofrecen música verbal, donde viven,
muertas en vida, poetas que componen
cada día sus epitafios ante el jurado
de generaciones muertas
La flor en el cuaderno
Él camina con su flor por todo el parque
y en las calles aledañas hasta al edificio
donde vive su amiga. Le dice al portero
aquí estoy con mi flor y arriba vive otra flor,
mi amiga, y en cada departamento hay
flores y flores de distintos lares y en el techo
un jardín de flores y en el edificio de enfrente
plantas y arbustos y flores hasta
se llama el barrio, como aquel de Lima,
Miraflores, pero no quiere confundirse
con una sola colonia en este mundo
que quiere descolonizarse, variarse,
y celebrar el derecho a contradecirse—
siguiendo así el mandato del
gran Dios nuestro, Walt Whitman.
Entonces sí ando siempre
con una flor en la mano
y otra en el cuaderno.
Buscar
Tengo tantas preguntas
sobre aquel Pueblo Rico
en la falda oriental
de la montaña.
¿Se llama
Embera Chami
el pueblo indígena
y katío su lengua?
¿Y se la conserva
ahora por escrito?
¿Hay diccionarios
bilingües:
español y katío?
Y ¿cuál es el papel
del municipio
y de la región
en conservar
esta herencia
lingüística,
esta manera
antiquísima
de nombrar
la experiencia?
Y ¿por qué debo
saber yo,
historiador,
autonombrado,
de una Colombia
donde buscando
oro lo encuentro
en el canto de
un pájaro
en Pueblo Rico?
Indran Amirthanayagam
Es poeta, ensayista y blogger en inglés, español, francés, portugués y creole haitiano (http://indranamirthanayagam.blogspot.com). Ha publicado 25 colecciones de poesía, incluyendo Isleño (R.I.L.Editores, 2021), The Runner’s Almanac (Spuyten Duyvil, 2024), Seer (Hanging Loose Press, 2024), Ten Thousand Steps Against the Tyrant (BroadstoneBooks.com,2022), Blue Window/Ventana Azul (Lavender Ink/Diálogos Books, 2021), The Migrant States (Hanging Loose Press, 2020), Sur l’île nostalgique (L’Harmattan, 2020) y Lírica a tiempo (Mesa Redonda, Lima, 2020).
Otros poemarios incluyen Il n’est de solitude que l’île lointaine (Legs Editions, Haiti, 2017), The Elephants of Reckoning (Hanging Loose Press, NY, 1993) que ganó el Premio Paterson 1994 en los Estados Unidos, Uncivil War (Mawenzi House, Canada, 2013), Sin adorno: lírica para tiempos neobarrocos (Universidad Autónoma de Nuevo Leon, 2013) Ventana azul ( El Tapiz del Unicornio, México, 2016) Coconuts on Mars, Paperwall Publishers, Mumbai, 2019 (www.paperwall.in), En busca de posada (Apogeo, Lima, 2019), y Paolo 9 (Manofalsa, Lima, 2019).
Amirthanayagam ha recibido becas de The Foundation for the Contemporary Arts, the New York Foundation for the Arts, the U.S./Mexico Fund for Culture y the MacDowell Colony. Su poemario The Elephants Of Reckoning ganó el premio Paterson en 1994. El poeta ganó los Juegos Florales de Guaymas, México, con su poema “Juárez” en 2006.