Hernán Contreras
Presentamos un conjunto de poemas de Hernán Contreras R. (Santiago de Chile, 1990) Integrante de Colectivo Abierto y Revista Mal de Ojo. Editor y fundador de Trizadura Ediciones. Publicó las plaquettes de poesía Proyecciones (La Maceta Ediciones, 2018) y El agua que baja (Porlasmias Ediciones, 2022). También es autor de los poemarios Trayecto hacia algunos días (Ediciones Filacteria, 2018) y Arritmia (Lagar Editores, 2024). Actualmente reside en Puerto Montt, donde trabaja en proyectos literarios, culturales y educativos. En el plano internacional, ha participado en el Festival Internacional de Poesía Joven Jauría de Palabras, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia (2021), del Encuentro Internacional de Poetas de Zamora, Michoacán, México (2024) y de la Feria del Libro de Funza, Bacatá, Colombia (2024).
De Arritmia (Lagar Editores, 2024)
Paseo
Ver siluetas alargadas
multiplicadas como mano que se agita
y adivinar qué banca se mantendrá vacía
las vitrinas nos vuelven a recordar el paisaje
soledad encandilada al estar rodeada de gente
la imagen de quien se va sin despedirse
se borra un domingo
en silencio
los ojos buscan el sol en las veredas
los pasos propios en los oídos
cuando todos los colores están en donde pertenecen
se escucha un pétalo
al caer
aun así
alguien podría extrañar los paños en el piso
las palomas entre las migas
carros de comida cada vez más ofertas más distracciones
pero sólo se confunden entre sí papeles y hojas secas
que amagan con quedarse fijas en el suelo
donde algunos duermen y soportan el silencio hasta la hora
en que abren las oficinas
nos dicen
que un lugar se vacía con su propia multitud
el ruido de un río
que anuncia un escape entre tanta piedra.
Sobre el ritmo
La gente avanza
avanza más rápido
tanto
que parezco inmóvil
el segundo
de seguir con la mirada
al agua de una cascada en su caída
el ritmo descontrolado es visible
desaparecen
quienes intentan detenerse
personas arrastradas
es más una forma ya realizada
que una conducida por un movimiento propio
la imagen es la de un cuerpo
tirado por todas las cosas
que están en tu ciudad
Cambio
palabras en la micro junto a un vendedor ambulante
se camufle así un verso entre el azúcar y las ruedas
y la hoja tenga el peso necesario para resistir
en las puertas al momento del cierre
si esas palabras fueran de un material físico
pero golpean
no logro ver si llegan a los pies
sin tener que vivir con la mirada hacia el suelo
una pausa
previa a los nervios por encontrar alguna que encaje
en cada momento
que no sea al azar o guiada
por otro ruido ambiente:
emisiones de ondas
de las que olvidamos su origen
porque la hora avanza
ojalá llegar de día a la casa
porque la hora avanza
aquí me han ofrecido de todo
porque la hora avanza
nunca un poco de tiempo
para mirar entender
cuánto de este paisaje
podemos decir
y cuánto
sigue
como lo recordaba
De Los colores del silencio (inédito)
Observaciones del que espera
esperar la noche
era entender la oscuridad
en cada piedra lanzada
iba un sueño
mirar cada concha de mar
como un hogar abandonado
despertar a las polillas
al revisar en los bolsillos
la sombra de cada cosa
se evapora del suelo
saber que este color
solo dura unos segundos
el viento persiste en una vida despierta
porque todas las hojas de un árbol
pueden ser pájaros dormidos
Interrupción de un paseo
eres un temblor
luego de cualquier noticia que lleve un nombre conocido
las manos reproducen el ruido
como única distracción posible
damos sentido a lo insignificante
proteger el cigarro de la lluvia el papel de las manchas
porque salvar las cosas que son capaces de sostener un mundo
nos lleva el corazón nuevamente a flotar en una poza
hasta borrar a toda una montaña que temblaba en el suelo
rompemos la imagen con nuestro movimiento
salvamos nuestras pertenencias olvidamos
dejamos que los pasos molesten a las aves
caminamos con una mano en el bolsillo
sin ritmo sin buscar
inútilmente monedas y papeles
que suenen y recuerden el día de ayer
caminar al fin
es mirar lo que va quedando atrás
De Recordatorio (inédito)
Cuenta regresiva
Braceo hundido para regresar al lenguaje después de haber dejado
todas las palabras dadas vueltas
en los juegos de memorice y sopas de letras que fueron tus últimos ejercicios
quizás olvidar fue tu defensa
nos lo recordaste en cada sonrisa confundida con un recuerdo
y fue congelarse ante una estrella fugaz
nos diste señales de tu fuga
la vista olvida
¿qué era de los sabores y sonidos?
¿Qué veías entonces en el espejo cuando peleabas con tu imagen
porque alguien te seguía al baño?
Le hiciste muecas y te reíste
al creer que en juego la dejabas encerrada al salir
y sí había algo encerrado para siempre
ustedes fueron mis nuevos recuerdos y quizás los primeros. Cambié mi historia tapando goteras del techo con las fotos de mis hijos y nietos. Pero el papel cedió y cayó mojando toda mi cama. Amé nadar y me ahogué en los sueños.