"Terraza para pisar el vacío" de Guillermo Martínez González
Selección y nota de Alejandro Cortés González
Hoy, 11 de mayo, el poeta, ensayista, librero y editor Guillermo Martínez González (1952-2016), estaría celebrando su aniversario de pasos en el mundo. Hoy, 11 de mayo, celebraremos su nacimiento 10 meses después de su deceso, con esta selección de poemas de su libro Terraza para pisar el vacío (abril de 2015 Biblioteca Libanense de Cultura), el último libro que el poeta publicó en vida.
Terraza para pisar el vacío tiene la ciudad, el desamparo y la ira de quienes la poblamos con ruidos: la loca en el parque, el músico deforme, el habitante de calle, el árbol derribado, el caballo agonizante, el ave muerta, la noche, la caída, el silencio, todo se funde en un gran himno urbano con el que Guillermo Martínez González, cantó la ciudad por última vez.
VISIÓN DE UNA LOCA EN EL PARQUE
Como la Madremonte
En la boca del infierno
Como el salivazo que se agota
En el delirio
Apareces
Vestida de andrajos
Pringados por la lluvia y el polvo.
Te golpea
La letanía del hambre
Que sube hasta tu cerebro.
De la basura,
De un agua percudida por el grito
Del humo de las colillas
Emerges con tu desnudez de niña
Envejecida por el despojo
Que abofetea la tarde
Y el silencio de Dios.
NOCTURNO
Este es el instante de los acantilados
Y de los fantasmas que gimen
En el soplo de las tinieblas.
La hora en que los sonidos crecen
Y la ciudad se queda sola
Y como una bestia muda
Despierta en busca del amanecer.
La hora en que la noche se baña
En el silencio de los árboles
Que temblorosos se sumergen
En el luto de la ciudad.
ERES EL ORANTE DE LOS BALDÍOS
Eres el extranjero absoluto
El beodo de los semáforos
El vago aterido por el alba.
Tuyos son los perros
Que te persiguen como letanías
De los niños de la noche.
Apenas masticas las palabras
Y eliges el grito en lugar del silencio.
Conoces el vómito de la madrugada
Eres el rey de los andrajos
El exhibicionista de la llaga
El experto en los balbuceos
De la autocompasión.
En tus arengas de sarna te complaces
En tus insultos de harapo
Y condimento podrido.
Eres el orante de los baldíos
Tuyo es el salmo
De los basureros
Y de las muñecas mutiladas
Que yacen en los charcos.
Tuya es la nada
La agonía de los agujeros
Que te gritan
Que sólo perteneces
A la aguja de los desvaríos
Al latigazo impávido
De las tormentas.
CANCIÓN DEL MÚSICO DEFORME
Te duele en el cuerpo
La perfección de la rosa
Y el piano que estremece
Los cristales de la luz.
Tratas de olvidar
Tu cuarto vacío
Inventando la música.
Desnudo te paseas
Sin contemplar las flores
Que se agitan en el patio.
NADIE SABE
Nadie sabe
Por qué ha muerto este pájaro.
Tal vez fue la lluvia
O un viento airado
O el silencio de la última estrella.
Si cayó de un árbol
O en pleno vuelo
Traicionado por el frío.
Lo cierto es que está ahí
Inerte en el pavimento
Barrido por las hojas:
Y nos duele su plumaje
Humillado por el barro.
VUELVE CRECIENTE
Vuelve creciente
Con tu rugido de bestia oscura
Cargada de troncos
Animales muertos
O con los ojos desorbitados.
Vuelve con la furia de tu agua
Que muerde los acantilados
Con tu diluvio
De batracios negros
Agonizantes en la hierba
Y tu grito de dios
Herido en la noche.
Inundación que arrasa piedras
Perros y flores de plátano.
Turbión
Agua de tormenta
CANTILENA
Toda la noche el viento
Todo el viento toda la noche.
VÉRTIGO
Lenta
Cae una hoja
Lo demás es silencio.
CABALLO AGONIZANTE
En el caballo herido
En la espuma
De su boca
Veo su destrozado
Amor por la hierba.
ÁRBOL DERRIBADO
Ya no serás
Del viento
Pajarero de flores rojas
Caído como un hombre
Que se desangra
CIUDAD
Maligna es esta ciudad
Como baba del diablo
Desde que surge la luz del sol.
Donde la lluvia cae interminable
Como una monodia
Sobre los ventanales y los muros
Sobre el rostro de pordioseros
Que aúllan como bestias heridas
Ante los basureros
Las iglesias
Y los portalones de mármol.
Donde cada saludo
Se parece a una pedrada
E inútiles brillan las estrellas en el cielo.
Sí, maligna es esta ciudad:
Temibles sus atardeceres de vaho plomizo,
Sus crímenes ocultos, sus jóvenes asesinos
Que conspiran en los bares.
Terrible es el espasmo de sus prostitutas
En los baños o los camastros de tendido grasiento
Mientras avanza el alba como un puñal
Sobre el sueño de los pobres.
EN EL SILENCIO TU NOMBRE
He aquí que he pronunciado
En el silencio tu nombre
Cuando a nadie le importa tu fuego
Y los hombres como autómatas
Se dirigen al trabajo.
Cuando a nadie le importa tu nombre
Y los milagros desconocidos
Que despiertas.
He ahí que me levanto
Estremecido por tu temblor de cielo
Por la oscura herida
De tu más remota estrella
Por tu extraño esplendor de criatura mortal que besa el infinito.
He ahí que te llamo
Porque estoy poseído de ti
Que iluminas y devoras
Y permaneces invisible
Porque a nadie se le ocurre
Abofetear el rostro de la vigilia
Y descubrir los terrores del relámpago.
***
GUILLERMO MARTÍNEZ GONZÁLEZ
La Plata, Huila, mayo 11 de 1952 – Bogotá, 26 de septiembre de 1016. Poeta, ensayista, director de la Librería Trilce y de Trilce Editores, en Bogotá. Ha sido incluido en numerosas antologías en el país y en el exterior. Vivió Beijing, China Popular, y publicó varias versiones de poesía china. En 1993 obtuvo la Beca de Creación Individual de poesía de Colcultura, 1993. Poeta Homenajeado en el Festival Internacional de Poesía de Bogotá de 2013.
Publicaciones de poesía
- Declaración de amor a las ventanas (1980)
- Puentes de niebla (1987)
- El árbol puro del río (1994)
- Si ese viento fuera mío (Selección de poemas, 2013)
- Terraza para pisar el vacío (2015)
Publicaciones de antologías, notas literarias y traducciones
- La poesía de Matilde Espinosa (Selección, prólogo y notas, 1980)
- Diario de medianoche y otros textos (Notas de poesía, 1984)
- Marx y los poetas (Selección, prólogo y notas, 1986)
- El bosque de los bambúes (Versiones de poesía china, 1988)
- Mitos del Alto Magdalena (Relatos, 1990)
- El solitario de la Montaña Vacía (Versiones de Wang Wei, 1996)
- El vuelo diabólico - Poemas de vampiros y murciélagos (Selección, prólogo y notas, 1999)
- El ermitaño de los lotos verdes (Notas de poesía, 2005).
https://www.fundaciontrilce.com