Jardines de ónix - Johanna Carvajal
Johanna Carvajal, joven poeta de la ciudad de Medellín, convoca en su libro Jardines de Ónix, la presencia de la diosa en sus diversos avatares míticos, como figura emblemática de la propia poesía según Robert Graves, pero también como genitora de la vida, como musa y fuente del canto, celebración del amor y la luz, así como de lo numinoso, de las fuerzas de la naturaleza, el misterio y la destrucción.
Es la suya una palabra de inspiración órfica, sin duda alguna, extraña un tanto a este tiempo y este territorio desacralizado que ha perdido toda conexión con lo sagrado, con la magia, con los secretos de la naturaleza que no obstante, aún reconoce en su vacío la ausencia de lo divino en tanto principio ordenador, origen y destino.
Siete instancias convocan en este libro la diversidad de sus nombres y rostros, sus naturalezas, sus atributos pero sobre todo, el poder inspirador que aún guardan en su seno: desde Athenea, Hécate o Perséfone, Artemisa y Afrodita en Grecia, hasta Oshun, Yemayá en África, o Toyotama Hime en Japón, Freyja, Ceridwen y Brigit entre los celtas y nórdicos o las egipcias Isis y Hathor, las Hindúes Kali, Parvati, Sarasvati, hasta nuestras mexicas Xochiquetzal, Tonantzin, entre muchas otras. Todas ellas invocadas aquí a la manera hímnica como en cada cultura se las ha nombrado desde siempre.
En la voz de Johanna Carvajal estos textos exaltan entonces la esencia misma de la poesía como expresión de lo inmemorial, lo que permanece en nosotros como idealidad, como expresión última y conmovida de lo absoluto, que la presencia de las distintas divinidades aquí manifiestas, hace símbolo vivo y otra vez creador.
Lucía Estrada
BENZAITEN
La flauta se mezcló
con el acunar de los bosques,
la madera trajo hoy peces de bambú.
*
El ruido de los laúdes
despertó al animal,
a la fiera que dormitaba
dentro de la caverna…
Desde la oquedad
de la piedra,
la montaña floreció.
XILONEN
Rayo del amanecer
la luz
se levanta
en los campos de maíz
el ave se anuncia…
Y la vida es joven
las mujeres ancianas
peinan los cabellos de sus niñas
todo es claro,
el fin aún no nos abraza
y las flores de agua
cobijan a la mujer de mejillas rojas.
BASTET
El sistro arrulló
a los pequeños
cuando eran tomados
en brazos.
Desde el Nilo
la música
sonó al vaivén
de las palmeras
y el calor
sobre las pieles desnudas
ahuyentó la maldad
de las voces de hielo
y cuando estos se fueron
los gatos salieron
a caminar
para agradecer
al Sol.
RATI
Acoge en el crujir de los huesos
la desesperación hecha roca
la miel corre por los labios
y da el sabor de las hojas
en la lengua
al encontrarse fugitivamente
con la baba goteante…
no se desangra el querer
cuando la sal
toca las venas…
El cuerpo es herida eterna
que se acumula
en las grietas
de los azahares.
GANGA
Una joven es río
además de ser isla,
regresa a las orillas
para enajenarse de sí…
Se baña desnuda
entre lotos
esperando la tempestad…
Las aguas corren
con el abandono
ansiando ser naufragio.
AMA NO UZUME
Las camelias se regocijan
al vaivén de los tambores
que acarician los ancianos en la tarde.
*
El herrero
moldea deprisa la hoja de la espada
que será el instrumento de sangre en la historia futura.
UKE MOCHI
Los melocotones dulces
evaporaron las lágrimas
de la nostalgia anaranjada,
la miel segregó
compañías, suaves notas
de aliento…
Donde los suspiros
fueron melodía
para el árbol viejo de Sakura
que se mece sosegado
con el riachuelo.
***
JOHANNA CARVAJAL (Medellín - Colombia, 1993). Es estudiante de Historia y Formación Musical con énfasis en saxofón. Además, se ha desempeñado como gestora cultural, conferencista, redactora, y editora ocasional.
Sus poemas han sido publicados en varias revistas literarias, en distintos medios virtuales y en antologías nacionales e internacionales. Ha participado en diversos encuentros de poesía de carácter local, nacional e internacional. Ha sido traducida al árabe, canarés, vietnamita, francés, nepalí, italiano y al inglés, y publicada en algunos medios en Vietnam, Egipto y España. Es autora de los poemarios Ensoñaciones Grises (2018) y Jardines de Ónix (2020).